Atragantamiento: decálogo para evitarlo

Uno de los peligros más habituales en menores de 5 años es la aspiración, ingestión y atragantamiento u obstrucción de nariz y oídos con objetos pequeños tales como monedas, juguetes o partes de estos, pilas, semillas, hebillas, bolitas, alfileres y clavos. 
Como advierte el Manual de Prevención de Accidentes elaborado por la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP), cualquier objeto representa un riesgo potencial ya que:

• Si el objeto ingresa a la vía aérea puede ocasionar desde ahogamiento hasta diversos trastornos bronquiales y pulmonares. 
• Si continúa la vía del aparato digestivo, puede producir lesiones o intoxicaciones.

Identikit de los más riesgosos

• Los alimentos en general. Son especialmente peligrosos los caramelos y las pastillas pequeñas, las frutas secas, los pochoclos y los maníes. Cualquier alimento sólido en trozos grandes o poco masticados es potencialmente riesgoso.
• Cualquier objeto pequeño que se pueda introducir por completo en la boca. Los objetos brillantes o de colores llaman más la atención. En lactantes y niños pequeños a veces es un hermano el responsable de colocarle objetos en la boca.
• Las pilas o baterías de reloj, computadoras o juegos son muy atractivas para los más pequeños. Su ingesta puede producir además de ahogamiento, quemaduras en el tracto gastrointestinal, principalmente en el esófago o el estómago.
• Los “globitos de carnaval” o cualquier objeto de goma de tamaño pequeño, incluyendo la goma de los chupetes.

Señales
Los signos de riesgo dependen del tipo de acceso:

• Por ingestión: babeo intenso, dolor e imposibilidad para tragar alimentos. 
• Por aspiración nasal: dolor y gran cantidad de mucosidad (a veces con sangre).
• Por ingreso auditivo: dolor y dificultad para escuchar bien.

Decálogo de prevención

1. Si hay pequeños en la casa mantenete alerta. Su curiosidad natural aumenta el riesgo de accidentes. Ocultar los objetos peligrosos es solo una parte de la prevención. También es importante no perder de vista al niño.
2. Ocultá y mantené fuera de su alcance cualquier objeto peligroso, especialmente artefactos con pilas o botones como calculadoras, relojes y juegos electrónicos. 
3. No le ofrezcas monedas, bolitas, dados, botones y objetos pequeños para jugar. Tampoco lo dejes jugar con cuentas de collares, fideos, tornillos o pequeñas piezas de juegos para armar de los hermanos mayores.
4. Examiná minuciosamente sus juguetes por si existe alguna pieza que pudiera desprenderse y ser dañina como, por ejemplo, los ojos de las muñecas y los osos de peluche. Revisá las tapas que cierran el  lugar en que van las pilas para chequear que sean inviolables.
5. Comprá juguetes acordes a la edad y destreza del niño. Para saberlo, leé detenidamente la etiqueta del fabricante con las recomendaciones sobre el uso.
6. Enseñá a los hermanos mayores que deben guardar sus juguetes y mantenerlos alejados del pequeño de la casa.
7. Evitá el uso de prendedores, broches de gancho, alfileres, dedales, etc.
8. Recordá que cualquier medicamento para adultos en forma de comprimidos, grageas o cápsulas puede actuar como un cuerpo extraño para el niño, además de las acciones farmacológicas que la droga pueda producir si se absorbe en el estómago o intestino.
9. Nunca dejes al bebé tomar solo la mamadera. Si la sostiene, permanecé a su lado. No dejes tampoco al niño comiendo solo. Aunque sepa hacerlo es necesaria la supervisión de un adulto, si es posible sentado junto a él. 
10. Revisá las tetinas de mamaderas y chupetes, en especial las de goma. Si están rajadas o muy blandas cambialas; el bebé puede ingerirla y eso ocasionaría una obstrucción intestinal.

Más información
Manual de Prevención de Accidentes elaborado por la Sociedad Argentina de 
Pediatría (SAP). Disponible en  https://bit.ly/2JSczem