¿Tenés una alergia alimentaria?

La alergia es una reacción inusual del organismo ante la presencia de sustancias que resultan tóxicas llamadas alergenos. 
En el caso de los alimentos, el alergeno más frecuente es un componente proteico (glucoproteinas), independientemente de su cantidad. 
Entre los alimentos que poseen este componente se encuentran la leche, el huevo, el trigo, el maíz, las legumbres, las nueces y los productos de mar. 
Sin embargo, algunas personas presentan alergia a ciertos alimentos que no contienen esta proteína, entre ellos la frutilla, el tomate, el chocolate y los cítricos.
Las señales más frecuentes, son:

• Órganos sensoriales: conjuntivitis alérgica, laberintitis (inflamación del laberinto, canal del oído interno).
• Piel: prurito, dermatitis, urticaria, rubor, eczema alrededor de la boca.
• Sistema respiratorio: rinitis alérgica con líquido nasal, obstrucción, estornudos, tos, dificultad respiratoria y sibilancias.
• Sistema gastrointestinal: prurito o hinchazón de labios y lengua, náuseas, cólicos, vómitos, diarrea, espasmo, dolor abdominal.

Qué hacer
Si sospechás tener una alergia alimentaria pero no podés identificar el alergeno, un recurso útil es llevar un registro diario de comidas. Allí deberás anotar todos y cada uno de los alimentos que consumas para identificar cuál de ellos aumenta los síntomas.
Asimismo, conviene anotar todas las reacciones:

• Cómo te sentís antes de comer un alimento.
• Cómo te sentís inmediatamente después.
• Cómo te sentís durante las 24 horas posteriores.

Esto último es importante porque algunas reacciones pueden ser lentas. 
Luego de realizar el registro durante una semana, llevá tus anotaciones a un alergista. Serán de mucha ayuda para determinar el alergeno y definir el tratamiento, que suele consistir en el reemplazo del alimento para disminuir las reacciones adversas que provoca.
Otro recurso importante es leer las etiquetas:

• La clara de huevo se utiliza en comidas congeladas y otras mezclas de alimentos. Las yemas se toleran casi siempre.
• El trigo puede estar presente en sopas empaquetadas y salsas.
• La soja puede estar presente como lecitina en salsas y productos industrializados.

LOS ALERGENOS MÁS Y MENOS COMUNES