Zurdera: mitos y curiosidades sobre el uso dominante del lado izquierdo

Desde 1976, cada 13 de agosto se celebra el Día Internacional de la Zurdera, una jornada que promueve la reflexión acerca de las dificultades con las que convive el 10% de la población mundial.
La zurdera se define como una tendencia natural a servirse preferentemente de la mano izquierda o también del pie del mismo lado. Esta tendencia es consecuencia de la lateralidad que caracteriza al cerebro, permitiendo la siguiente clasificación:

• Diestro: habitualmente utiliza la mano derecha para realizar las acciones. 
• Zurdo: utiliza la mano izquierda para hacer las cosas. 
• Zurdería contrariada: su lado izquierdo es el dominante, pero utilizan la derecha por influencias sociales y culturales.

La cualidad de la zurdera está presente desde siempre, así como el estigma que acompaña a la persona que la porta en distintas partes del mundo. Basta con pensar, por ejemplo, la diferencia entre “diestro” (derecho, hábil, experto, favorable, sagaz) y “siniestro” (izquierdo, malintencionado, infeliz, funesto).
Tanto por la discriminación y por el hecho de vivir en un “mundo de diestros” (la mayoría de las herramientas y utensilios de la vida cotidiana están diseñados para el manejo de la mano derecha), la vida para los zurdos sigue siendo difícil. Persisten regiones en las que, por ejemplo, los niños son forzados a escribir y comer con la mano derecha (en la India, por ejemplo) generando una zurdería contrariada que puede afectar seriamente el desarrollo y la autoestima del niño.

Algunos mitos

• Los zurdos son más “creativos”. Antes se pensaba que el hemisferio izquierdo del cerebro aportaba el pensamiento lógico y el derecho, el creativo. Por eso se creía que, dependiendo de la mano que use más y el tipo de personalidad, las capacidades podrían ser más analíticas (diestros) o artísticas (zurdos). Sin embargo, un estudio de la Universidad de Utah realizado en 2013 refutó dicho mito después de analizar a 1.011 voluntarios. Así encontraron, por ejemplo, que no hay un hemisferio completo más dominante que el otro. Sin embargo, es cierto que el cerebro está lateralizado y, en el caso de algunas funciones concretas, cada hemisferio tiene una especialización. La dominancia de una mano u otra tiene que ver con dicha lateralización. Debido a que en el cerebro se produce una decusación (una especie de cables cruzados entre hemisferios), el hemisferio derecho controla las funciones motoras del lado izquierdo del cuerpo y viceversa. Así, los zurdos usan las áreas motoras de la corteza cerebral derecha más que la izquierda. 
• Los zurdos tienen mala salud y muerte prematura. Ninguna de las dos cosas es cierta. Como en el pasado mucha gente zurda era obligada a usar la mano derecha, en las estadísticas de personas mayores se contaban muchos menos ancianos zurdos, situación que se asoció con alguna causa de muerte prematura. 
• Los zurdos tienden a concentrarse en su mundo interior. No hay estudios que correlacionen personalidad y lateralidad. De hecho, un equipo de investigadores de la Universidad de Wellington, en Nueva Zelanda, descubrió que diestros y zurdos no manifiestan diferencias significativas en extraversión, apertura a nuevas experiencias, responsabilidad, amabilidad e inestabilidad emocional.
• Los zurdos son más propensos a sufrir afecciones del sistema inmunológico, enfermedades tiroideas e inflamatorias del intestino. En 1994, Philip Bryden, un experto en historia de la psicología, desmintió esta teoría tras analizar un total de 89 estudios, en los que habían participado más de 21.000 pacientes.
• La zurdera es una enfermedad. No, ni siquiera un trastorno que debería corregirse; aunque la educación, la presión social y otros factores externos pueden propiciar el uso de una mano más que la otra.